Un paterfamilia denunció las represalias de un Juez Familiar del municipio de Escárcega al revertir la custodia provisional de dos menores / Explica que interpondrá demandas contra la Policía Estatal por irrumpir de manera arbitraria en su domicilio.
Por: Ronny Aguilar
CAMPECHE, Cam. 28 de septiembre de 2017.- Rodolfo Luciano Ojeda Caballero, padre de familia, denunció las represalias del Juez de lo Familiar de Escárcega Antonio Cab Medina, mismo que le ha quitado la guarda y custodia provisional de dos menores porque considera que “ningún padre debe tener la custodia de los hijos, ya que él no necesitó padre para crecer”.
A pesar de que existen pruebas y evidencias de la violencia que la madre ejercía sobre los menores, tanto física como psicológica, y que la progenitora ha resultado con problemas psicológicos, el juez le ha dado la custodia promocional aun cuando uno de los menores ha señalado que se quitaría la vida si la separaban del padre.
Rodolfo Luciano Ojeda Caballero, maestro de educación especial, explicó que desde hace siete años vive un juicio del ramo familiar por la custodia de dos de sus hijos, mismos en el que los últimos cuatro años ha tenido la custodia provisional de los menores, hijos suyos y de Irene del Carmen Poot Tun, quien fuera su cónyuge.
En un inicio, la custodia provisional estuvo a favor de la madre, pero se le concedió un cambio de guarda y custodia ya que comprobaron agresiones físicas y psicológicas hacia los menores, además de un perfil psicológico desfavorable para la madre que la catalogó como no apta, por lo que después de dos años perdió la custodia provisional.
Todo lo anterior estuvo en manos del juez de lo familiar en el municipio de Escárcega, de apellidos Ramos Dolls; sin embargo, hace aproximadamente dos años, hubo un cambio en el Juzgado y el caso quedó en manos del juez familiar Antonio Cab Medina, lo que ocasión que el caso diera un vuelco por decisiones particulares del juez.
“En una reunión que tuvimos en el Juzgado, me dice el juez que ningún hombre debe tener la custodia de sus hijos, el propio juez me dice que él no necesitó padre para crecer, que sólo madre. Desde ese momento, empece a ver difícil la situación de mis hijos porque si meto un documento me lo rechazan, los acuerdos no llegan a tiempo y me va poniendo en desventaja, además de que yo vivo aquí (Campeche) y el juicio está en Escárcega, y me ha estado dificultando las cosas, hasta que ahora cambió la guarda y custodia”, explicó.
“El fin de semana pasado, el sábado a las ocho de la mañana, llegó la fuerza pública, rompieron la reja, rompieron una puerta, como si fuéramos delincuentes nos trataron a mis hijos y a mí, en short salí a defender a mis hijos… pero me amenazaron que si no entregaba a mis hijos me iban a arrestar”, externó.
“La madre de mis hijos se reía y mis hijos lloraban, los vecinos salieron y tomaron videos, los policías rodearon la cuadra como si fuéramos narcotraficantes, no se ha tomado en cuenta la opinión de los niños, ahora presentan otras pruebas psicológicas hechas por pasantes de la UAC donde es apta”, agregó.
Abundó que por las declaraciones emitidas por el Juez Familiar, acudió a la Fiscalía General del Estado en busca de justicia; sin embargo, la Fiscalía local, fiel a su tradición, ignoró la denuncia presentada, razón por la que decidió acudir a Derechos Humanos. En la Defensoría, obligaron a la Fiscalía a dar curso a la denuncia; no obstante, pasados los meses, volvieron a dejar el caso en el olvido, pero esto fue razón suficiente para que el juez incrementara las represalias.
“Considero que es represalia del juez porque cada que iba al Juzgado me hacía la advertencia de que mis hijos ya no iban a estar conmigo; ya me venía preparando, los últimos meses decidí que mis hijos no tenían que estresarse más, cada que los llevaba con la mamá los niños venían alterados, decían que la mamá les lloraba y les decía que se quedaran con ella y era tanta la presión que el niño dejó de comer por preocupación, a los 11 años esto impacta a cualquiera”, manifestó.
“Han cometido cualquier cantidad de irregularidades en el caso, las largas que le han dado, un juicio familiar que dura más de siete años, es increíble. ¿Para qué lo alargan? Le estaban buscando un motivo, no es justo lo que hacen, que se tome en cuenta lo que los niños dicen, ojalá y que las autoridades del estado tomen en cuenta lo que está sucediendo y hagan su trabajo”, exigió.
“Siento mucha rabia y dolor, no sólo porque no los tengo a mi lado sino por lo mal que la deben de estar pasando, no están en las condiciones que deben estar y, sobre todo, que cuando se estaban llevando a la niña ella les dijo que si la llevaban con su mamá ella se iba a matar, eso preocupa a cualquier padre, esto amerita que escuchen a los niños”, enfatizó.
Puntualizó en la necesidad de que el Tribunal de Justicia del Estado tome cartas en el asunto y que actúe de manera pronta y expedita, pues hasta ahora han sido totalmente parciales. Añadió que en los próximos días demandará a la Policía Estatal por la manera en la que irrumpieron en su domicilio.