Florecer desde la Cicatriz para transformar la herida emocional. Por Gabriela Ramírez SemMéxico CIUDAD DE MEXICO, D.F. 18 de mayo del 2016.- “Luego de mi cesárea me sentí ultrajada, rota, violentada. Aquello fue como una carnicería. Yo quería un parto natural y terminé en una cesárea, amarrada y semiconsciente por la anestesia. Es muy difícil entender el daño que este tipo de violencia genera en las mujeres”. Así lo relata Talina González, una de las tres fundadoras de la iniciativa Florecer desde la Cicatriz. Este proyecto que recién ha salido a la luz se trata de un esfuerzo que tiene la finalidad de abrir un espacio de apoyo y de contención para aquellas mujeres que han vivido una cesárea sin ninguna justificación. Sus fundadoras Talina González, Amaya Suárez y Dunia Verona, pasaron por una situación similar. Una expectativa de un parto natural que terminó en una cesárea en la que además sufrieron malos tratos por parte del personal médico. “Cuando salí del hospital y llegue a casa, no encontraba mi lugar en el mundo, me sentía completamente rota, sentí que me arrebataron algo, no sabía cómo explicarlo y sobre todo no sabía a quién recurrir”, expresó Talina González. Por eso, explicó Dunia Verona, decidieron abrir este proyecto, este espacio en donde se reúnen mujeres que han pasado por una situación similar. “Queremos transformar la herida emocional que puede dejar la cesárea en un motivo para florecer”. Amaya Suarez señaló que a diferencia de otros países como España, en México no existía hasta ahora un grupo para mujeres que hayan pasado por una cesárea que no querían y que no era necesaria. “Florecer desde la Cicatriz busca decirles a las mujeres que sí hay una luz, que saldrán de ese proceso, que incluso sí podrán tener hijos después mediante un parto vaginal y sobre todo, que hay otras mujeres que pasamos por eso y que las entendemos perfectamente, dijo Dunia Verona. Este proyecto comienza a dar sus frutos. A unos meses de su creación ha tenido ya dos reuniones con mujeres que han pasado por una cesárea para compartir sus experiencias y organizaron una campaña muy exitosa en redes sociales invitándolas a compartir sus historias. “De pronto parece que nadie lo ha vivido, pero en cuanto empiezas a hablar de ello, sale más y más casos. A nosotras de pronto nos comenzaron a llegar muchas historias no sólo de la ciudad sino de diversos puntos del país”, indicó Amaya. Las fundadoras de este proyecto, especialistas terapeutas, buscan brindar apoyo a cada vez más mujeres, además una incidir para lograr que se reduzcan los índices de cesáreas en México, que son muy superiores a lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Esta semana en redes sociales, se han sumado a los esfuerzos para conmemorar la Semana internacional del Parto Humanizado 2016 cuyo lema es: “Mi decisión, mi cuerpo, mi bebé”.
previous
next