Inspectores del Ayuntamiento de Campeche, encabezado por el priísta Edgar Hernández, hacen rondines nocturnos, acompañados por policías estatales, para decomisar productos a quienes laboran en el ambulantaje. Por Ronny Aguilar CAMPECHE, Cam. 9 de julio del 2016.- Continúan el hostigamiento y acoso de inspectores del Ayuntamiento de Campeche, encabezado por el priísta Edgar Hernández Hernández, contra vendedores ambulantes, incluso, realizan  rondines nocturnos, acompañados de la Policía Estatal Preventiva, para decomisar sus productos a quienes laboran o van de regreso de sus labores. Alrededor de la medianoche de ayer, Paginabierta.mx pudo constatar cómo inspectores municipales intentaron nuevamente decomisar y perjudicar el trabajo de un ciudadano que recurre al ambulantaje de manera honesta, para proveer a su familia. De regreso a su domicilio, un comerciante de elotes de la ciudad decidió descansar un momento en las bancas en donde se  encuentran las oficinas de la CNC, dejando libre su vehículo y herramienta de trabajo, segundos después arribaron dos camionetas blancas, Nissan, de doble cabina, del Ayuntamiento de Campeche, acompañada de una camioneta Ram, propiedad de la Policía Estatal, con media docena de elementos, por media docena más de los inspectores que rodearon al vendedor y el vehículo. Inmediatamente, se videograbó el hecho, como evidencia del abuso de autoridad y exceso en el uso de atribuciones del servidor público, violación al derecho constitucional al trabajo y  al libre tránsito, entre otras. Tanto policías, como inspectores, al ver que filmábamos y tomábamos fotografías de los hechos dejaron todo en advertencia de que no se le quería ver nuevamente en esa zona, porque está prohibido. Policías e inspectores sacaron sus teléfonos celulares y tomaron fotografías a este reportero, de igual forma, en un intento fracasado de intimidación. El ambulante no se inmutó, permaneció sentado y tranquilo en su banca, cuando se fueron las “autoridades”, dio las gracias, pero indicó que conocía a uno de los inspectores y que ya lo tenían harto, y a continuación señaló que ya anda preparado que si lo quieren “joder”, se los va a chingar, por lo que anda con un machete como arma, pues “ya estoy harto de que no me dejen trabajar, no estoy haciendo nada malo, por qué no van a agarrar ladrones”. Nada Justifica la violencia de ninguna forma, pero preocupa cuando es la autoridad la que presiona a la sociedad, al grado de tener que precaverse contra quien se supone debe velar por ellos y brindar seguridad y protección y son sin duda alguna, hoy en día, el peligro más grave para los ambulantes. Tarde o temprano, habrá violencia ante tal acoso de las autoridades y cuando eso suceda, nuevamente será culpa del Estado.