DestacadosOpinionFernando Ortega Bernés, corruptazo…

admin20/01/2015

20fer Por Javier Castillo Cuando fungió como presidente del Ayuntamiento de Campeche, Fernando Ortega Bernés, ordenó la remodelación del parque de San Martín, a petición de la familia propietaria del Hotel Plaza Campeche, además giró instrucciones para limpiar de venteros y fiesteros ese espacio de recreación. Así cumplió Ortega Bernés la orden caprichosa de esa familia. Es de subrayar que la remodelación del parque de San Martín se hizo con dinero del erario municipal procedente de los impuestos de los ciudadanos. Al sexenio del gobierno Justo y Solidario, le restan acaso unos meses de vida. Ya está en la recta final la administración gubernamental de Fernando Ortega Bernés, y, como suele suceder en los finales de los sexenios, el medio propagandístico de la familia caciquil de Campeche, empieza a destapar la cloaca, que no percibió durante los cinco años anteriores. Le sucedió a Eugenio Echeverría Castellot, a Abelardo Carrillo Zavala, a Jorge Salomón Azar García ni qué decir, a José Antonio González Curi, y al antecesor de Ortega Bernés, Jorge Carlos Hurtado Valdez. Los propietarios del medio propagandístico son insaciables con los centavos públicos. A Echeverría Castellot le enderezaron una campaña sucia al final de su sexenio por el hecho de retardar el pago de facturas por el concepto de propaganda y publicidad gubernamental, además de la protección periodística pactada. Para ello, utilizan voces de partidos opositores al PRI, y claro, la oposición en tácito acuerdo, acepta la condición de criticar, a cambio de publicidad gratuita, aunque después tengan que pagar las consecuencias. Ahora resulta que después de cinco años de silencio y elogios al gobierno Justo y Solidario, el titular del Ejecutivo resulta todo un corruptazo, por el hecho de que alguno de los funcionarios autorizó concesionar a una franquicia de café el uso del espacio de la reconstruida ex Aduana de Campeche. Pero el fondo del “descubrimiento” de corrupción en el gobierno de Fernando Ortega Bernés, no es la concesión, sino quién es el propietario de la concesión: Cruz Alfaro Isaac, el ex secretario de Gobierno de Azar García. La familia caciquil vive con el trauma y encono salomonista; aún no supera esa etapa en la que, movidos por la ambición de convertirse en banqueros socios del ex Banco Unión, fueron timados, como a otros socios, por Carlos Cabal Peniche. De ese fracaso culparon al gobierno y a Salomón Azar, y exigieron el reembolso de su dinero a costa de las finanzas públicas. La voracidad de la familia caciquil se reflejó al final del sexenio de González Curi, cuando este gobernante, en sociedad con el empresario maquilador paquistaní, Yousuff Andami, construyeron el Hotel Ocean View. La familia caciquil reclamó su parte, también quiso un hotel, y a costa de las finanzas públicas, ordenaron la construcción del Hotel Plaza Campeche, además de otro hotel cercano al primero. Sin importar violentar la reglamentación de Sitios Históricos, de manera arbitraria, construyeron ambos inmuebles. De esa corrupción, guardan silencio. Del 2009 al 2014, ha habido indicios de corrupción en el gobierno Justo y Solidario, pero para el medio propagandístico de la familia caciquil, esa etapa nunca existió, pero sí en cambio lo que está sucediendo al final del sexenio es grave: concesionar un espacio a una franquicia y poner a la venta un terreno aledaño al Centro de Convenciones Siglo XXI es la máxima corrupción que se ha registrado durante el gobierno de Fernando Ortega Bernés. Bueno, es corrupción, porque a la familia caciquil no se le ofreció la concesión, ni la venta a precio de remate del terreno conocido como Foro Ah-Kim-Pech. No está lejos el momento en que empiece el chantaje para que el gobierno del Estado sea obligado a ceder el área donde funciona el jardín de niños “Florinda Batista”. Al tiempo….

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Síguenos