El dirigente nacional de Morena señala que los males que aquejan a la nación ya no son un asunto del Papa Francisco o de ningún otro dirigente espiritual o social o político del extranjero. CHIGNAHUAPAN, Pue.  18 de febrero del 2016.- Andrés Manuel López Obrador aseguró que a los mexicanos les toca cambiar la realidad de opresión que se padece en el país, porque ya no es un asunto del Papa Francisco o de ningún otro dirigente espiritual o social o político del extranjero. Consideró que nunca en la historia de México, un dirigente espiritual, social, político extranjero había hablado con tanta claridad sobre  la corrupción, las injusticias y el por qué de la violencia, como lo hizo el Papa Francisco. En Chignahuapan, el presidente del Comité Ejecutivo Nacional Morena reconoció que el jefe del Estado Vaticano hizo  un buen diagnóstico de los males que aqueja a la nación. Sostuvo que el análisis que hizo el  Papa debería estar como nota principal en todos los periódicos, no se destaca, porque a los de la mafia del poder no les conviene que la gente se entere de lo que dijo el pontífice. Manifestó que se quiere que entre todos se logre una transformación en beneficio del pueblo, sacar a México de la decadencia, de la pobreza y para eso es Morena. Explicó que avanza  el partido político Morena y actualmente está en primer lugar en preferencias electorales a nivel nacional, pero desde luego, se tiene que concientizar al pueblo, porque los de la mafia del poder no quieren dejar de robar, no tienen llenadera y van a querer mantener el régimen corrupto a como dé lugar. Pidió decirle a la gente que si se acaba con la corrupción, se puede lograr el renacimiento de México, porque el país tiene muchas riquezas naturales  y un pueblo trabajador. Dijo que la decadencia en el país se  debe a la corrupción y al mal gobierno, porque lo que se hacen llamar gobernantes se dedican a robar, a saquear, ese es el último propósito que tienen sacar provecho de los cargos, es una banda de malhechores. Los gobernantes, prosiguió, forman parte de la banda que más daña al país, los que más roban, se han dedicado en los últimos años a entregar los bienes del pueblo y de la nación, así como las empresas públicas a particulares, a sus allegados y al extranjero. Puso de ejemplo que Enrique Peña Nieto reformó los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución para entregar el petróleo y la industria eléctrica y  actualmente los diputados federales del PRI  y del PAN pretenden presentar una iniciativa de ley para privatizar el agua. Señaló que Morena lucha para parar en seco todas esas privatizaciones y no solo frenar esa política privatizadora, sino revertirla, cuando triunfe Morena se cancelarán las reformas laboral, educativa, fiscal y energética. Mejoras, al evitar que políticos corruptos se roban 10% de presupuesto El político de izquierda afirmó que se pueden mejorar las condiciones de  vida y de trabajo, a partir de evitar que los políticos corruptos se roben el 10 por ciento del presupuesto público que para este año fue de cuatro billones 750 mil millones de pesos, es decir, casi 500 mil millones de pesos, significan seis años del presupuesto de Puebla. Puso de ejemplo que mientras los políticos corruptos, que no pierden su respetabilidad, se roban 500 mil millones de pesos del presupuesto público de  México, Estados Unidos pide la extradición de Joaquín “El Chapo” Guzmán, porque en un mes introdujo 50 toneladas de cocaína con valor al menudeo de 12  mil millones de pesos y al año 150 mil millones  de pesos. Aseguró que con evitar el robo del presupuesto, habría dinero para rescatar al campo, pagar bien al productor de sus cosechas, crear empleos, garantizar el derecho del pueblo a la salud, a la educación, a la seguridad social, sin necesidad de aumentar impuestos o endeudar al país, es decir, impulsar el desarrollo de México, y mencionó que otra medida es acabar con los privilegios de los altos funcionarios públicos. Ejemplificó que utilizan el dinero del presupuesto para mantener una estructura burocrática, faraónica, costosísima, son como zánganos, ganan mucho dinero, como es el caso de los ex presidentes de México: Carlos Salinas, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón, cada uno tiene de pensión un millón de pesos mensuales. Prosiguió que Enrique Peña Nieto se compró un avión de lujo siete mil 500 millones de pesos, lo acaba de estrenar hace una semana, estaba contentísimo, a los periodistas les mostró la alcoba principal, la suite del avión y les dijo “ya ven que no es un palacete, no tiene alberca, “quería también una alberca”, pero antes de utilizarlo para un viaje, Peña ya lo había visitado dos veces por dentro. Adelantó que en el 2018 se venderá el avión de lujo de Peña y la casa blanca de 200 millones de pesos. El problema es que Peña Nieto da un mal ejemplo, porque el ex procurador general de la República se compró un jet 80 millones de dólares y el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, recibió una casa de descanso en Malinalco, Estado de México, de manos del empresario Armando Hinojosa. Indicó que si se acaban con la corrupción y los privilegios de los altos funcionarios públicos habrá recursos para sacar adelante al país.