https://www.youtube.com/watch?v=EddpDGC4Z3M La senadora Sansores San Román señala que es un oprobio, indigno y una vergüenza para el Senado de la República haber escogido este año al empresario Alberto Bailleres para otorgarle la medalla “Belisario Domínguez”, sin tener mérito. “¿Qué manera de degradar al Senado, convirtiendo esta decisión en capricho de un partido político o de acuerdos cupulares?”, cuestiona la legisladora campechana. Por Daniel Sánchez CIUDAD DE MEXICO, D.F. 4 de noviembre del 2015.- La senadora Layda Sansores San Román señaló que es un oprobio, es indigno y una vergüenza para el Senado de la República que se haya decidido otorgar la medalla “Belisario Domínguez” a un empresario como Alberto Bailleres González, quien no ha entregado ningún beneficio a la patria, ni a la humanidad. “¿Qué manera de degradar al Senado, convirtiendo esta decisión en capricho de un partido político o de acuerdos cupulares? ¿Qué falta de escrúpulos para deshonrar la memoria de un héroe que defendió la libertad de expresión, que creía en la dignidad del Senado, que fue un mártir de la democracia?”, cuestionó. “En este país tenemos un sistema kafkiano, que sentencia a los corruptos y traidores con penas inusitadas, a unos se las hace cónsules, a otros embajadores, ministros de la Suprema Corte, y si  tienen una casa blanca y los debidos conflictos de intereses, entonces tienen derecho a conservar la investidura presidencial impunemente”, expresó. “No hay explicación para dar esta medalla emblemática a un hombre que le sobran monedas de oro, pero en serio, a un representante de la oligarquía que ungió y protegió a Victoriano Huerta ¿Qué le debe Peña, siempre me pregunto, que no le haya pagado con petróleo? Que nos diga, acaso el PRI no encontró ciudadanos, con los méritos suficientes, como (Porfirio) Muñoz Ledo, Carmen Aristegui, Elena Poniatowska, Toledo, Ifigenia Martínez, en fin, premiar a uno de ellos sería respetar la esencia por la que fue creada esta insignia”, puntualizó. En su intervención, durante la sesión del Senado de la República, Sansores San Román recordó que la entrega de la medalla “Belisario Domínguez” era un acto de solemnidad republicana, el decreto fue emitido por el presidente Adolfo Ruiz Cortines y el objetivo era premiar a las mujeres y hombres mexicanos que se hubieran distinguido por su ciencia o su virtud como servidores a la patria y a la humanidad. “¿Cuáles son las virtudes del señor Bailleres, haber capturado al Estado, amasar una fortuna, gracias la transferencia del bien público y transformarlo en bienes privados; recibir de Hacienda, esto es un hecho, prerrogativas y privilegios que luego les permiten convertirse en filántropos y tener teletones; tener eficientes outsourcings?”, preguntó. ¿Qué beneficio ha entregado a la patria, cuando en lugar de crear bienestar social, ha sido un generador de desigualdad? Alberto Bailleres González ha sido uno de los que ha hecho más profundo el abismo entre la opulencia y la miseria, me pregunto cuáles son sus méritos hacia la humanidad, ay, pues ser “totalmente Palacio”, ironizó. E insistió: “¿Qué premiamos, que sea el segundo hombre más rico de México, entre 50 millones de pobres que se ahogan sin esperanza? Su riqueza, no vengan aquí con historias fantasiosas, no la logró por la cultura del esfuerzo, sino por la suerte de la herencia, que se arrastra desde épocas porfirianas”. “Si esto es una palmadita para alentar al señor Bailleres en su incursión en la industria petrolera, la nueva diversificación de sus recursos, entonces esto es un golpe brutal a la memoria histórica de México”, advirtió. “Priístas, un poco de pudor ¿Qué ya no les queda nada en su morral? A ustedes que le gustan las formas y lo bárroco de los ritos, pues empiecen primero por respetar la fecha determinada por el decreto, que es el siete de octubre, no cuando se le dé la gana a Peña Nieto, porque ese día fue asesinado Belisario Domínguez”, aseveró. “Y si los están obligando a entregar medallitas a empresarios millonarios, por favor, que no sea la Belisario; les sugiero que instituyan una nueva presea, esa sí se la podrán dar a todos los ricachones que quieran, esa presea podría ser la del “borrego de oro”, que al fin y al cabo, aquí no  les importan los valores, aquí les importa la lana, y esto es un oprobio, es indigno, es una vergüenza para el Senado”, finalizó.