OpinionCRISTAL DE ROCA/Lo más grave

admin26/11/2014

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CIMACFoto: César Martínez López Por Cecilia Lavalle* Cimacnoticias ¿Qué es lo más grave de la violencia contra las mujeres?, me preguntan. ¿Qué no disminuye? ¿Qué cada vez atestiguamos mayor crueldad? ¿Qué la impunidad es la regla? No creo, contesté. Todo eso es grave. Pero, en mi opinión no es lo más grave. Veamos: ¿Sabemos cuántas mujeres son asesinadas en México? ¿Cuántas han desaparecido? Las especialistas en el tema sí saben. Las activistas sí saben. ¿Pero el grueso de la sociedad? ¡No tiene idea! ¡No las cuenta! Literalmente. Y eso es lo más grave: la inconmensurable legitimación de la violencia contra las mujeres. Para muestra unos botones. ¿Cuántas mujeres debieron desaparecer para que Ciudad Juárez fuera foco de atención gubernamental? ¿10? ¿20? ¿40? ¡No! Centenas de mujeres desaparecidas y otras tantas asesinadas para que se mirara el asunto “con preocupación”. ¿Cuántas deben desaparecer o aparecer asesinadas en el Estado México o en cualquier otra entidad del país? ¿Hay alguna muestra de indignación nacional? Recuerdo bien las cartas que como periodista recibí cuando escribí respecto a Ciudad Juárez. Me decían que dejara de hacer eco de mentiras, de chismes, porque en Juárez no-pa-sa-ba-na-da, y que, en todo caso, se trataba de mujeres que andaban en malas compañías, que se lo habían buscado. ¿Una mujer se busca que la violen, la asesinen y la tiren a la basura? Otro botón. En una fiesta de bienvenida a jóvenes en la Universidad de Aguascalientes, a la que acudían estudiantes y docentes, drogan y violan tumultuariamente a una joven. ¿Qué dijo su rector cuando se enteró de los hechos? Que había que averiguar bien si ella no había tenido culpa, antes de señalar a los alumnos y maestros de su universidad. Palabras más, palabras menos. ¿De qué puede ser culpable esta joven? ¿De ir a una fiesta? ¿De beber? En México, una víctima de violación siempre será considerada culpable de inicio: ¿Cómo iba vestida? ¿Por dónde caminaba? ¿Iba sola? Otro botón. En Tapachula, Chiapas, un ex legislador dijo en la radio que las leyes como las mujeres estaban para violarlas. ¿Algún escándalo nacional? ¿Alguna consecuencia política? Lo grave, lo más grave de la violencia contra las mujeres es que nuestra sociedad considera que es “normal”; la autoriza, la avala, la legitima. La violencia contra las mujeres en México es más aceptada que el racismo, que la agresión contra los animales. Y eso explica que, en promedio, seis mujeres sean asesinadas cada día, y que, según la organización Nuestras Hijas de Regreso a Casa, cada año desaparezcan más de 2 mil. La crisis de México no comenzó con 43 estudiantes desaparecidos. Comenzó cuando decenas de mujeres desaparecían, y ni contarlas por cientos provocó la indignación nacional. Mientras la violencia contra la mitad de la población sea aceptada, tolerada y justificada, nuestro país no tendrá remedio.

Apreciaría sus comentarios: cecilialavalle@hotmail.com. *Periodista y feminista en Quintana Roo, México, e integrante de la Red Internacional de Periodistas con Visión de Género.

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