(Una exploración al Plan de Nación 2018-2024)
Por: Abraham Castelán
“Salir de lo tradicional mediante el trabajo conjunto y pacífico es regenerarse.”Anónimo
CAMPECHE, Cam., a 9 de agosto del 2018.-La ratificación y entrega del acta que hace constar a Andrés Manuel López Obrador como Presidente Electo de México por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación este 8 de agosto, es una confirmación de lo que para muchos realmente ocurrió el 1 de julio: una revolución en las urnas que de forma silenciosa y pacífica produjo un cambio en el destino de México.
Después de aprender a desaprender AMLO le dice adiós a su rol del primer rebelde de la nación para pasar a ser parte del poder constitucional.
López Obrador nos ha demostrado que existe la frugalidad necesaria en sus actos para llevar a cabo la ética del futuro“Reducir el tamaño de la administración pública federal sin sacrificar la calidad del gobierno” tal como expone el Plan de Nación 2018-2024.
La participación de la ciudadanía funciona ya como tabula rasa, una sociedad que ha permitido al actual representante del ejecutivo, en su sexenio 2018-2024, comprender las sensaciones que arroja la justa distribución del poder y las reflexiones derivadas de la vida al interior del presidencialismo.
La automatización del servicio público será pionera en su tramitología para enfrentar el sobrepeso de la administración. Demostrando así que este gobierno entrante ha logrado leer los balances de la economía y el estado de resultados que deja el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
En el momento que el nuevo gobierno entre en vigor, el decrecimiento del Estado permitirá detectar más fácilmente la corrupción. Reconocer que tan utópico resulta virar hacia un mundo más incluyente, comprendería la verdadera esencia del cambio. Pues gobernar tomando el contexto histórico como primer referente debe de ser la actitud que impregne el discurso a partir de 2018.Conseguir las dimensiones de un buen gobierno entre un mundo lleno de explotación al otro, es impostar la altura de miras en la historia internacional.
“No dejar a nadie atrás”
En la agenda 2030 de Naciones Unidas y sus 17 objetivos de Desarrollo Sostenible se impulsan nuevos paradigmas en los que tiene cabida el ideario estimulado por el gobierno del Licenciado Andrés Manuel López Obrador. “Por el bien de todos primero los pobres”.La reforma ha llegado de la mano de los más simples actos en nuestra vida común, hechos que incluyen las formas más básicas de aplicar el discurso. Y es que no hay mejor forma de proteger la soberanía que cuidar de nuestros intereses humanos en primer lugar.
Las aspiraciones integradas en el Plan de Nación 2018-2014 potencializan a México con un peso de relevancia en el nuevo orden internacional. Ante los factores ambientales que ponen en riesgo a la humanidad un cambio en las formas e intenciones de gobernar nos ayudará a concentrarnos en la construcción de habilidades para los líderes del mañana.
El artículo 89 fracción X de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos expresa la conformación de la conciencia legislativa que debe regular la conducta del presidente:
“Dirigir la política exterior y celebrar tratados internacionales, así como terminar, denunciar, suspender, modificar, enmendar, retirar reservas y formular declaraciones interpretativas sobre los mismos, sometiéndolos a la aprobación del Senado. En la conducción de tal política, el titular del Poder Ejecutivo observará los siguientes principios normativos: la autodeterminación de los pueblos; la no intervención; la solución pacífica de controversias; la proscripción de la amenaza o el uso de la fuerza en las relaciones internacionales; la igualdad jurídica de los Estados; la cooperación internacional para el desarrollo; el respeto, la protección y promoción de los derechos humanos y la lucha por la paz y la seguridad internacionales;”
Más allá de la necesidad eminentemente económica existen otras áreas donde el gobierno de Andrés Manuel López Obrador requerirá operar con gobiernos afines y de preponderancia estratégica, en la realización de objetivos concretos de carácter bilateral y regional como cultura, educación, medioambiente, tecnología, ciencia, derechos humanos y migración. El Plan de Nación previsto para el sexenio 2018-2024 concentra sus esfuerzos en la defensa de los derechos humanos de las y los mexicanos en el exterior, en especial en la zona fronteriza con Estados Unidos.
El pueblo de México ha logrado impostar su liderazgo energético en el mundo, midiéndose con los gigantes del comercio internacional, a pesar que los gobiernos del pasado signaron estrategias mediocres de negociación comercial como el TLCAN. En concordancia con la agenda 2030 el nuevo gobierno dará prioridad al combate a la pobreza y desigualdad para activar oportunidades de trabajo y reinserción a las y los mexicanos que abandonan la paz del hogar para laborar en actividades ilegales o son víctimas de la migración forzada.
En síntesis el perfil revivificador del gobierno entrante nos muestra de que callada manera un nuevo amanecer ha llegado, como después de un incendio, la vida pública comienza a regenerar. Y los hechos de lo acontecido nos dicen que el cambio nunca se acaba.