El presidente de la organización Unidos por una Vida Digna, Diego Cervera, denuncia que los médicos se rehúsan a operar por miedo a contagio, y señala que continúan los casos de negligencia y falta de atención oportuna.
Por Ronny Aguilar
CAMPECHE, Cam. 19 de noviembre del 2016.- Diego Cervera Balán, presidente de la organización Unidos por una Vida Digna, dio a conocer un caso de discriminación y violación a la confidencialidad en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para con un paciente con VIH, a quien los médicos se rehúsan a operar por miedo a contagio, y señaló que continúan los casos de negligencia y falta de atención oportuna.
El defensor de derechos humanos de las personas que viven con VIH, a las afueras de la delegación del IMSS, informó de un caso alarmante de mala atención del IMSS, en el que se presenta una tardía atenció y varias violaciones a derechos humanos, tales como la discriminación, violación a la confidencialidad del paciente y malos tratos.
“Es una persona que fue atropellada y atendida desde el principio con cierta discriminación y cierto miedo, vemos que existe todavía en el personal del Instituto Mexicano del Seguro Social temor por el asunto del contagio, no sé si no tienen los protocolos internacionales para evitar los contagios, pero la atención del paciente se ha estado alargando mucho, el chico necesita una operación en la cadera, parece que es una prótesis la que se le debe poner y ha sido trasladado ya varias veces a Mérida con la cadera rota”, explicó.
“Los médicos señalaron que no podía ser operado aquí, lo mandan a Mérida, ahí los maltratan a él y la familia, lo regresan a Campeche, aquí lo valoran y es cuando intervinimos como Asociación y lo vuelen a trasladar a Yucatán, los médicos en Mérida le dicen que no es candidato para cirugía, lo regresan a Campeche y lo que buscamos en reunión con el delegado del IMSS es que le den solución ya”, detalló.
Además de la tardía intervención al paciente, Cervera Balán mencionó que se rumora mucho en los pasillos sobre la condición del pasante, lo cual es violatorio de la confidencialidad y en caso de pacientes que viven con VIH, es grave que esto suceda por la discriminación predominante en la sociedad.
“Vemos que se sigue dando el asunto violatorio a la confidencialidad, se sale la información del Hospital, un médico comentó que no va a operar, porque se pueden contagiar, el familiar desesperado por la situación que ya cumplió más de un mes con la cadera rota, estuvo a punto sacarlo del hospital, ya que un médico del mismo Instituto se le acercó a ofrecer sus servicios de manera privada por 50 mil pesos, pero el médico no tenía la facultad para hacer ese procedimiento”, reveló.
El activista indicó que sostuvieron una reunión con el delegado del IMSS en Campeche, Rafael Rodríguez Cabrera, quien se comprometió a que se realizará la operación a la brevedad posible.
“El dice como especialista ortopedista que es sencillo, que se va hacer aquí en Campeche, es decir que tenía una solución, le decía al delegado el por qué esperar tanto, si tenía solución ¿Qué es lo que buscan? Que se agrave o muera, pensamos incluso que lo que buscan es eso, para acortar gastos, puede uno pensar muchas cosas, pero la realidad es que persiste la atención tardía, la discriminación, la estigmatización, la negligencia y demuestra la falta de capacidad del Seguro Social”, acusó.
Comentó que la atención en el estado vecino no es muy diferente, ya que igual hay malos tratos, además de discriminación, por ser campechano, por lo que dijo que es necesario que pare la burocratización de los servicios médicos para una atención de calidad y calidez.
“Dicen que lo bueno casi no se cuenta, pero como dijo la niña que evidenció a Nuño, no se debe contar, se debe de ver y aquí no se ve”, argumentó.
“Otra cosa que se vemos es la fricción que se da entre la asociación civil y el Seguro Social, nosotros le decimos las cosas al delegado, el delegado sanciona al médico, y si lo corren, no hay cómo suplirlo y la gente se queda sin la atención médica y si se queda, no va a querer atender a los muchachos, es decir, se rompe la relación armoniosa y pierden los pacientes que viven con VIH, el que deben de hacer la función los del “trabajo social” y no sucede, los tienen en otras funciones, menos su trabajo, que es de un enlace entre la Asociación y el hospital”, concluyó.