La directora de Ecosur, unidad Campeche, Griselda Escalona, advierte que los recursos naturales que se están destruyendo con el monocultivo de la palma aceitera, son irrecuperables, y plantea que lo que está en juego no es el futuro de un gobierno, sino de una sociedad en su conjunto.
Por Ronny Aguilar
CAMPECHE, Cam. 18 de noviembre del 2016.- La directora del Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), unidad Campeche, Griselda Escalona Segura, dijo que es necesario que se respete el principio precautorio, antes de continuar con la siembra de palma africana en el estado, puesto que los recursos naturales que se están destruyendo, son irrecuperables, y planteó que lo que está en juego no es el futuro de un gobierno, sino de una sociedad en su conjunto.
En entrevista con Paginabierta.mx, la científica manifestó que hay que tener mucho cuidado con el tema de la palma aceitera, puesto que los costos podrían ser más grandes que los beneficios, por lo que expresó que es necesario, antes de iniciar la siembra, tener un plan de factibilidad.
“Hay veces que hay elefantes blancos dentro del mismo gobierno, hay cosas que se quieren promover, pero hay que demostrar si realmente vale la pena”, indicó.
“¿Vale la pena a cambio de destruir la biodiversidad? Digo, yo estaría en la posición de que creo que no se han hecho estudios de factibilidad y que sí se han tomado ya acciones, hay gente que ha estado haciendo compras y cultivando la misma palma, pero no hay estudio de si eso va a ser benéfico, a diferencia de los recursos naturales que tenemos”, cuestionó.
Escalona Segura afirmó que este megaproyecto es más una postura “política”, ya que es estatal y nacional para “producción”, pero sin tomar en cuenta de parte del estado, las afectaciones a los recursos naturales y es donde se debe tener cuidado.
“Esas producciones, en pocos años, no son redituables y por mientras ya tenemos extensión y deforestación en muchas áreas, hasta el momento, en Chiapas, por lo menos, se tiene probado que no ha sido redituable y sabemos que es un negocio lleva varios años para ser redituable, y eso es lo que se debe valorar”, aseveró.
“A la larga puede ser un error del estado el querer invertir en eso, tampoco puedo asegurarlo, pero por experiencias, como la de Chiapas, que lleva muchos más años y son dependientes, dependen de las plantas que hay en otra parte, como Costa Rica, para poder hacer estos cultivos y algo que sí se ha probado, es que tener producción heterogénea es más benéfico, que tener monocultivos”, expuso.
“Otra vez estamos en contra de la naturaleza y disminuimos nuestra biodiversidad y eso no se va a recuperar, el problema es ese, no vamos a recuperar lo que teníamos, aunque hagamos muchos programas de reforestación, las selvas no van a ser las mismas, como no lo son ahora, a cuando estaban los mayas y antes, porque los mayas generaron cambios igualmente, ya no tenemos vegetación original, de alguna forma han sido modificados”, asentó.
Aseguró que lo que está en juego es el futuro de todos: “Siendo drásticos, tenemos el futuro en juego, no el futuro de un gobierno, sino de toda la comunidad, de todos los niveles y estratos sociales”.
“Se debe respetar el principio precautorio, es mejor a dañar, ya hay algunos cultivos, ahí ya no se puede hacer nada, hasta donde sé, hay algunos puntos donde no se debió sembrar, pero ya se hizo y no podemos ir atrás y ese es el problema, tenemos que cuidar las áreas naturales protegidas, que son los pulmones y además son el último recurso y si lo quitamos ¿Qué vamos hacer? ¿Un desierto de palma?”, insistió.
“Nos está faltando visión de largo alcance, queremos ahorita explotar los recursos y obtener ganancia, a costa de miles de millones de años que han transcurrido para tener las vegetación que ahora se tiene”, finalizó.
